Domplines a la luz de las velas

Cuando estaba en el bachillerato, mis amigos se reunían con o sin motivos  única y exclusivamente a hacer unos domplines. Eran sus favoritos. De las una y miles de veces que los prepararon solo asistí una vez, y creo que fue porque era la última reunión nuestra. No volví a involucrarme en ningunos domplines hasta hace unas semanas que por H o por R, me decidí por tomar las riendas para organizar unos, con mis compañeros del trabajo.

Aunque se tardó en decidir fechas y coordinar preparativos, el día llegó. Lo organicé en casa de una tía por la facilidad del espacio (según un listado esperabamos muchos invitados). Estuve al pendiente de casi todos los detalles de la fiesta para que estuviese en orden. Y como el pero siempre existe tengo el mío. Pero… mi tía olvidó decirme entre tantas cosas, que su inversor estaba dañado. Cuando lo dijo, ya tenía a todos invitados con la dirección donde llegar (aunque algunos se quejen) y sin otro lugar donde organizarlo. Aunque agregó: Mija, no te preocupes que el único problemita de la luz es que llega a las 7:00pm, y se va a las 2:00am.

Bueno, está bien, le dije. De todas formas no tengo elección, y si se va a las dos de la madrugada puede ser una buena hora para dar por terminada la fiesta.  Aunque la hora de inicio era a las 7:00pm, deben saber que mis invitados llegaron alrededor de las 10:00pm. (disculpándoles que se perdieran algunos minutos para llegar).

Todo iba bien, algo para picar, cervezas, y unos tragos para amenizar el ambiente. Rostros conocidos, otros por conocer. La cena estaba lista, pero no era hora de comer.

En un momento se apagó todo. ———– Yo simplemente no lo podía creer. Pensé que era el momento exacto de caer PLOP como condorito. Dejé a los invitados diciendo las frases conocidas de cuando se va la luz “ahora si fue” “coge ahi” “Se arregló esto” “anda er diaa” y otras más, y entré  a la casa a buscar una solución. O halarme de las greñas, por tremendo problema que tenía encima. Lo único que encontré en la cocina, fue una vela que dejó mi tia, por si acasooo la luz no llegaba a las 7:00pm ( antes de empezar). Pueden visualizar este cuadro? Una vela y como 17 personas.

Se colocó encima de la mesa. Y creo que empezaron a contar alguna historia. Subí las escaleras con un foco, buscando “algo” y lo único que encontré fueron dos velones decorativos bien guardaditos en una gabeta. Sin pena me lo llevé afuera, y los prendí. Alguien me dijo “Damaris, y esos velones no son de decoración” Fueron, my darling, le dije. Hoy son velas y punto. Desconozco si se los regalaron a mi tia de madres, cumpleaños o algún festejo. Solo sé que sirvieron para algo.

Después de todo, jamás imaginé que nos comeríamos los domplines a la luz de las velas. !Qué romántico! No?

Después de cenar decidimos salir de la casa porque la luz no llegaba. Fuimos a un lugar público a seguir la fiesta. Bien público por cierto.

No sé si el apagón fué lo mejor que sucedió, porque después de todo la pasamos bien. Y cuando me acordaba de la luz, me reía sola.

Hoy me levanté pensando en dos cosas:

1ro. Que como escuché en algún lugar, talvez el dicho de ” a falta de pan, casabe” debería decir “a falta de pan, domplines” Eso si rinde!!!!!!!!

Y 2do. Lo que vi anoche fué un holograma, o estuviste ahí??